lunes, 21 de octubre de 2013

Codillos al tomillo con guarnición de patatas y zanahoria

Hoy aprovecho que ha venido mi hermanico de Málaga para hacer unos buenos codillos al hornoo :). Y así ya aprovechaba para darle rienda suelta a mi imaginación. La receta es muy sencilla y el resultado está bastante bien, podría ser una buena receta para Navidad.








·INGREDIENTES:

- 4 codillos (uno por persona)
- 2 cebollas
- 1 y 1/4 vaso de vino blanco
- 1 hoja de laurel
- Sal
- Pimienta negra
- Tomillo en rama (yo he puesto seco)
- 1 pimiento de cornicabra no muy grande
- 2 patatas grandes
- 1 zanahoria grande
- Orégano (o hierbas provenzales)

* A mí me hubiese gustado ponerle romero pero no tenía. Lo recomiendo.


· PROCEDIMIENTO:


En una olla express (rápida) ponemos un poco de aceite de oliva, el vaso y cuarto de vino blanco, la hoja de laurel, los codillos, el pimiento de cornicabra, las dos cebollas peladas y cortadas en rodajas y bastante tomillo. Si tenemos ponemos el romero también. Sal y pimienta negra. Se pone a fuego medio y, cuando la olla comience a pitar, dejamos los codillos haciéndose durante 30 minutos para que se pongan tiernos.



Mientras, ponemos a precalentar el horno a 170º aprox. 

Pelamos y cortamos las patatas en trocitos irregulares y la zanahoria en rodajas y lo disponemos todo en la bandeja del horno. Les echamos sal, pimienta, tomillo, romero y orégano y las regamos con un poquito de aceite de oliva.

Cuando hayan pasado los 30 minutos haciéndose los codillos, los sacamos y los colocamos sobre la cama de patatas y zanahoria puesta anteriormente. Volcamos la salsa que ha quedado con los codillos (el vino, con la grasa de los codillos, las especias, la cebolla, el pimiento de cornicabra...).


Los metemos en el horno y vamos controlando que no se quemen (tienen que quedar doraditos), podemos ir regándolo con agua de vez en cuando para que tengan humedad dentro del horno y no se resequen. Cuando veamos que se nos han dorado un poco, sacamos la bandeja, salpimentamos otro poquito y les damos la vuelta para que se doren por el otro lado. También le damos la vuelta a las patatas para que se doren por los dos lados. Volvemos a meter la bandeja en el horno y, cuando se haya dorado por la otra parte y veamos que las patatas están bien hechas, sacamos la bandeja del horno y...¡A comer!


No hay comentarios:

Publicar un comentario